lunes, enero 29, 2007

Reloj


¿Leer o no leer el diario del otro? Yo decido siempre leer, porque soy incontrolablemente curiosa, porque tengo hambre del "otro", del encuentro y desencuentro. Así llegué a la entrada del lunes 26 de septiembre de 1954 de los diarios de Alejandra Pizarnik, donde escribe:
"El reloj es un viejo que murió de un ataque al corazón y luego resucitó (para vengarse de los que se sentían molestos con el ruido de sus latidos)."
La imagen estaba hecha; el resto fueron dos fines de semana llenos de tinta china y acuarela. Declaración y agradecimiento profundo por su clarividencia, a Alejandra Pizarnik.lf
P.D. También he subido la imagen de la entrada "Matrushka".

domingo, enero 28, 2007

Metaística

S., J. y yo sentados frente a frente conversando en un autobús:
S- Sin lentes no veo nada.
Yo- Te tienes que revisar la graduación.
J- ¿Cuánto tienes?
S- Punto algo en cada ojo.
J- Nada tío, yo tengo mucho más. Una vez perdí las gafas y tuve que venir hasta acá sin ellas, y llegar a los lugares, y tener conversaciones normales con la gente. Y yo decía "Pero que casa tan ordenada tenéis" y me respondían "¡Pero si la casa es un asco!" Pero es que yo iba a tientas, no veía nada.
La mujer sentada junto a J. voltea a verlo sonriendo.
Yo -Ahora que hay rebajas deberíamos revisarnos la graduación. Yo también quiero lentes nuevos porque estos están ya muy chuecos.
J- ¿Chuecos?
La mujer también pone cara de "¿Que queeeeeé?"
Yo- Sí, que no están derechos.
J- Ah, que están torcidos.
Yo- No, torcido es así (movimiento de manos que exprimen un mechudo).
J- No, eso es retorcido.
La mujer asiente con un movimiento de cabeza.
S- No, retorcido es como los personajes de "The Key".
Todos reímos, menos la mujer.
S- También se usa "chueco" para decir que alguien no es derecho, que hace cosas medio ilegales.
La mujer abre los ojos en señal involuntaria de asombro.
J- ¿También que es perverso?
Yo- No, perversos los de "La llave".
Y volvemos a reír, menos la mujer.
Yo- No tiene que ser "malvado", basta con que busque cómo salir de lo legal para hacer alguna movida.
J- ¡Vosotros sí que tenéis palabras chungas! ¿Se dice X está chueco?
S- No, "X hace movidas chuecas".
La mujer nos mira ya con cara de "Joé, qué tema".
S- ¿Se han fijado que últimamente nuestras conversaciones son muy metalingüísticas?
La mujer pone cara de "¡Pero que dices! ¿Meta queeé?"
J- ¡Qué va!
Yo- Como sea, ¡No es mi culpa!
S- Yo creo que sí.
Y seguimos discutiendo sobre quién es el culpable de enredarnos con palabras hasta que la mujer se atraviesa para pinchar el botón para pedir la parada. Justo antes de bajar, nos escudriña también buscando al culpable de ocasionar conversaciones meta, meta, ¡metaísticas!

martes, enero 23, 2007

Eu não percebo


En portugués "no entiendo" se dice "eu não percebo"... la expresión me atrae porque insinua que la no comprensión tiene origen en los sentidos cerrados, como si la imposibilidad de entender fuese sensorial y no intelectual, cultural, ontológica etc. logrando así una perfecta negación del mundo. Se me antoja una letanía:
Diario del domingo lleno de trágicas noticias, "Eu não percebo"
Cabellos enredados, uñas rotas, "Eu não percebo"
Silencio de los dioses, "Eu não percebo"
amistades muertas, "Eu não percebo"
la loca del pueblo que camina descalza también en invierno, "Eu não percebo"
pero esta negación lingüística de las tragedias se parece a un niño que tras ver por la cerradura voltea a un espejo y lo niega todo. No. "Eu não percebo" es más profunda, como un ciego que coge por primera vez un trozo de hielo, o el hijo que oye a su madre decirle que no lo ama, como el sueño de angustia que nos despierta desde siempre. La expresión "Eu não percebo" implica el universo cerrado del silencio, hermosa, trágica y suculenta. lf.

domingo, enero 21, 2007

again


Estos días se han llenado de un extraño silencio, de pensamientos que parecen a la vez viejos y nuevos... Otra vez pasé el día pintando (la tesis bien gracias) ¿qué hago yo investigando el léxico disponible de la gente si soy tan feliz llenándome las manos de tinta? Cuando era el momento de elegir pensé que necesitaba algo más ordenado, más analítico que me salvara de la locura... sí, así es como llegué a ser lingüísta en días hábiles, y artista frustrada en las madrugadas y fines de semana.lf.

sábado, enero 20, 2007

Matrushka


Hoy desperté sin ganas de nada y no trabajé. Terminé un cuadro ideado desde noviembre, dedicado a mi abuela. Descubrí que las acuarelas y la tinta china también saben llorar. lf.
El marco del cuadro reza:
Yo sabía que la tristeza caería sobre mi frente
como una luna súbita y celosa,
que colgada a mis hombros
me obligaría a arquear la espalda
y caer en cualquier rincón
como un animalito cansado y herido.
Lo que no sabía era que la encontraría así:
con su nombre en mi nombre,
su rostro en el mío,
y que entonces el dolor de su ausencia
sería doblemente amargo.
lf. 25/agosto/2006
SMA

viernes, enero 19, 2007

Pizarnik, diarios


Hoy me compré los Diarios de Alejandra Pizarnik como quien compra un pasaje para visitar a un buen amigo. Luego, en la sobremesa, discutíamos con J. sobre si es ético o no leer los diarios de otra gente ¿Qué le dirías a Kafka si te encontrase en un café leyendo sus diarios? Por la noche, al volver a casa en tren, la propia Pizarnik dio explicación al porqué vuelvo siempre a sus palabras: "Si es que leo a Proust, es porque yo elijo a Proust y porque mi estructura se identifica con él y elige su obra y no cualquier otra. Mis angustias no nacen al contacto con las líneas, sino que se limitan a asentir familiarmente y a reconocerlas como cosas ya experimentadas". Estas reflexiones, sin embargo, no puedo encontrarlas sino en sus diarios. Puede argumentarse que este es un caso especial ya que Pizarnik era y se concebía como una escritora, que no es lo mismo leer el diario de cualquier tío que pase por la calle, sin embargo insisto en la palabra como confesor. Cualquiera que elija escribir un diario acabará por plasmar reflexiones propias, acaso más "asentadas" que otros pensamientos por el hecho de tener que ser materializados en tinta (o pixeles, como sea el sistema motriz se ve envuelto en el proceso etc.). Quizá la lectura de esas reflexiones nos lleven a algo más que satisfacer una curiosidad, acaso propicien una mejor comprensión del otro. Eso en el mejor de los casos. No hay que descartar que exista gente como los personajes de "The Key" de Tanizaki...

jueves, enero 18, 2007

La letra como confesor

El corpus de mi investigación está hecho de textos escritos por alumnos jóvenes que estudian español como lengua extranjera. Para obtener los textos ofrezco un taller de escritura a cambio del cual los participantes me dan permiso de usar sus escritos en mi investigación. El taller suele ser muy corto: 10 horas en una semana o semana y media. Ahora que he vuelto también mentalmente de los viajes, me dedico a transcribirlos y no acabo de sorprenderme ante el descubrimiento de la letra como confesor. Mis alumnos, a pesar de estar escribiendo en una lengua extranjera, y todos los esfuerzos e inconvenientes de comunicación que eso implica, a sabiendas de que yo, a quien a penas conocen, voy a leer sus escritos y usarlos para mi investigación, escriben sobre cosas muy personales, cosas que les preocupan. Manifiestan su tristeza, la saudade provocada por la lejanía de los suyos, los sentimientos de frustración ante el choque con una cultura ajena, el miedo de que le ocurra algo malo a sus seres queridos, miedo a enfermarse, al invierno... a estar solos. Todos estos sentimientos, ante la letra, son más fuertes que cualquier autocensura. Somos seres gráficos, parecería que en esas manifestaciones yace nuestra libertad y nuestra esclavitud...

lunes, enero 15, 2007

Deshaciendo maletas...



S., al regresar de un viaje, no suele deshacer su maleta, sino que espera a que ésta se disuelva. Así, la casa va recuperando lentamente antiguos objetos propios: cepillos de dientes, ropa sucia, zapatos tierrosos, pero va recibiendo también objetos nuevos, totalmente ajenos a ella. En esta ocasión, además de trapos de colores, la casa se va llenando también de aromas: mezcla roja de especias para preparar cuscus, una piedra jabonosa con olor a ámbar, un té que imita muy modestamente la del herbolario del zoco que generoso nos recibió varias veces en su puesto para negociar, pero también para conversar (el de la foto no es él, ya que se negó a aparecer junto a su tienda por motivos religiosos. El que aparece en la foto es un bereber que nos invitó té a la menta en el patio de su casa). Va la receta del herbolario como un recuerdo pa' los cuates a los que les gusta beber té:
Se pone en un litro de agua a punto de hervir
1. 2 cucharaditas de té verde "gunpowder" osea el que viene en bolitas.
2. Un manojo de menta fresca o en su defecto, hierbabuena.
3. Una pisca de granos de anís pequeñitos.
4. Dos estrellas de anís estrellado.
5. Tres cardamomos.
6. 2 Cucharadas de verbena seca.
7. Una rajita de canela.
8. Azúcar o miel al gusto.
Se deja descansar 3 minutos. Se sirven dos vasos de té y se regresan a la tetera para remover el agua, se espera 1 minuto más y así otras dos veces. Después se bebe de inmediato (porque el té se va haciendo más amargo conforme pasa el tiempo. Como decía el herbolario, que este té sea a su salud. lf.

viernes, enero 12, 2007

Insistencia


Marca de sol Marroquí en el rostro, "floritas de la imaginación" pintadas con henna en la mano izquierda, aceite de rosas tras los lóbulos de las orejas, una receta de té hecho por un herbolario, una madrugada llena de sueños magrebíes... regreso lentamente degustando el viaje que, incluso en suelo español, se niega a terminar.lf.

jueves, enero 04, 2007

promesa a media noche


Estos días se suceden vertiginosamente: he deseado a penas al sentir la piel de cada uva romperse entre mis dientes, no he hecho propósitos de año nuevo sino vivir y ser feliz. El recuerdo de la neblina en Thessaloniki sigue fresco en mi memoria y en mi piel cuando la promesa de Marrakech se asoma a esta media noche. Pienso en cuan breve e insignificante es nuestra vida, y en lo importante que son los afectos. Al final de la jornada ¿qué es lo que nos queda sino el corazón rebozante de sentimientos? Nada somos, acaso una caricia desnuda, una sonrisa paciente, un andar de niño que juega al atardecer. lf

Isis


Ya no hay sacrificios para ella en la antigua ciudad de Dión: Macedonia duerme un sueño de imperio cubierta por una lluvia fina y una neblina casi incierta. Entre las ruinas, a los pies del Olimpo, Isis observa el fluir del tiempo: los rostros y generaciones que han pasado de honrarla religiosamente a admirarla con asombro e ignorancia. Conmigo ha sido generosa, me ha visto a través del reflejo del agua y me ha regalado e recuerdo de la niebla sobre el rostro. Hermosa Isis, que sea esa misma sonrisa generosa la que nos aguarde al fin del camino.lf.