Propósito tardío de año nuevo o ¿puedo yo ser una naranja?
Para evitar la idiotez cíclica evidenciada en la tesis (y sus negativas consecuencias psíquicas, emocionales y poéticas), no trabajaré en ella más allá de las once y media de la noche, y que maúllen todos los gatos. lf. P.D. ¿Ni siquiera limoncito?
No hay comentarios.:
Publicar un comentario