viernes, octubre 13, 2006

Berlín ajeno y frío que viene


El Javi está en Berlín. Se fue poco hace más de un mes a estudiar alemán en una academia. Al poco tiempo nos llamó para contarnos que lo pasaba mal: no lograba entrar en los grupos de amigos que se habían formado antes de su llegada, le había tocado quedarse en un piso con una maestra de español de cuarenta y tantos que no conversaba con él porque a ella "le pagaban por hablar" y bueno, regresaba a principios de este mes. Pues este mes no ha regresado el Javi: se mudó de piso, conoció gente maja y se queda otro rato. Dice que Berlín está lleno de bicicletas de museo, punkies y perros guarros (porque los punkies no los bañan), y que lo que mola es el Berlín del Este. Javi dice que le pasan por lo menos cinco cosas surreales cada día, pero como no lo escribe él en su blog, lo escribo yo a ver si así se pone las pilas y nos deleita con sus letras. Pienso en el frío que debe estar haciendo allá mientras me preparo un té con miel y me pongo calcetines gruesos: aquí, afuera, hace un sol engañoso; amanecimos a 9 grados, el viento es frío y anuncia un invierno crudo. Me cobijo con la lectura de los blogs y me pregunto a dónde irán los murciélagos en invierno: yo gustosa les cedería un pedazo de terraza para guarecerse del frío, en una de esas hasta Batman acaba en el balcón. ¡Ja!, creo que tengo que salir a la calle y dejar de leer blogs y cómics compulsivamente. Ustedes disculpen el debraye.

No hay comentarios.: