domingo, abril 09, 2006

Blogs de noviembre 2005

30 noviembre

Dulces

Mis nuevos alumnos aceptaron que nos reuniéramos hoy a la hora de la comida para tomar una clase. Les he llevado almendras cubiertas de chocolate en muestra de agradecimiento y la clase ha sido un éxito. Mi amiga A. decía que alimentar a la gente es una muestra casi maternal de cariño y atención. A mí me sorprende siempre ver a los adultos con la sorpresa de niño en los ojos, como si nunca antes alguien les hubiera regalado un dulce. Me gusta verlos así, como buscando un buen recuerdo y encontrándolo en el paladar. Estaban buenas las almendras.lf P.D. S. ha empezado a poner papelitos sobre los muebles con sus nombres en alemán. Sólo dos cosas pueden pasar: o enloquezco, o llego a la gramática universal.

20:25

29 noviembre

Gatobot

Al final del día me pregunto si será el invierno o si se trata de mi naturaleza que de vez en cuando se torna pesada y me obliga a arrastrarla tras de mí en las banquetas lloriqueando como una loca inocente que no quiere salir de casa, que su vida está en los libros, que su existencia sólo adquiere sentido en el mundo privado que esconde bajo la cama, bajo el abrigo, palpitante e indefenso como un niño herido. Yo le he mostrado la belleza de la neblina que se evapora con el aliento caliente de nuestros labios, la he llevado a trabajar a un salón lleno de ordenadores donde se entretuvo como nunca viendo un aparato de calefacción, la obligue a mirar al cielo, sosteniéndola de la quijada y la nuca para que no pudiera bajar el rostro mientras las cigüeñas volaban sobre nosotros, finalmente logré que se pusiera frente un grupo de desconocidos y hablara, tímidamente, sobre cómo la gente puede convertirse en palabras. Ha sido ella quien me ha arrastrado de regreso a casa, llorando, recriminándome que la obligara a contar sus secretos en público, que la separara de S. aunque fuera por breves horas, que la sacara al frío de dos grados y sin mascota. "No tenemos mascota" le contesté un poco harta de tanto drama "¡Claro que sí! ¡Tenemos un Gatobot!" me gritó a dos centímetros de la nariz y se trepó en el elevador. Abrió ella la puerta, le gusta abrir la puerta, saber que esa es su casa, y al entrar el Gatobot vino a frotarse en nuestras piernas. Ella volteó a verme con ojos de "¿Ves? La loca eres tú" y de inmediato fue al sillón a acurrucarse con S. que leía cómics, y a jugar con el Gatobot. La pobre no sabe diferenciar entre una mascota real y una ficticia. "¿Mucho frío?" me preguntó S. al sentir mi nariz helada "Sólo el suficiente para enloquecer" le respondí mientras acariciaba al Gatobot sobre mis piernas. lf.


28 noviembre

arco perfecto

A Camila nunca la escogían para los equipos en la clase de educación física. Era gordita y tenía los pies planos así que acababa siempre llegando al último en las carreras o cayéndose a medio trayecto.De los dos grupos que siempre se formaban con las mismas personas, ella era siempre la última en ser elegida. "Tienen a la gorda, ¡van a perder! ¡Van a perder!" Con las rodillas raspadas, la ropa sucia de lodo y las lágrimas sofocadas por el coraje, recibía los insultos de sus compañeras de equipo. Aquel día para sorpresa de todos, ella fue la que logró mantener el arco perfecto más tiempo que todas. Aparentemente su cuerpo regordete tenía más flexibilidad y fuerza que el de las niñas flacas y enclenques. Así que le tocó ser jefa de equipo y elegir del grupo a quienes ella quisiera. Escogió a una de un grupo, a otra del otro, dividió las amistades y logró tener dos equipos a su vez divididos. "No van a ganarnos" le decía una niña del equipo de Camila a su amiga en el otro equipo, "Claro que sí". Fué divertido. Jugaron, cometieron faltas, las amigas sacaron provecho de las debilidades bien conocidas de sus amigas, acabaron a golpes gritándose odio y trampas. Camila no recuerda si ganó su equipo o el otro, sólo guarda en la memoria que ese día ella fue la única que acabó con el uniforme limpio, las rodillas enteras y una sonrisa en la boca. lf

9:43
27 noviembre

Té para tres

Anoche, después de pasar toda la tarde traduciendo lenta y trabajosamente un artículo sobre Alfonso el Sabio y su corte, chateé con un amigo que sufre penas de amor. El conflicto se resume en preparar té para tres. En algún momento de la conversación me pareció que él hubiera querido decir que su amor por esa persona era incondicional, pero no lo dijo, sólo lo imaginé y así me fui a la cama pensando en mis propios afectos. Pasé mala noche, me desperté en la madrugada y tuve dificultad para volver a dormir. Soñé que venía a visitarme un primo, que se quedaba en casa, que había cosas que tenía que comprar, que me vengaría de aquellos que de niña me hicieron pasar malos ratos, que estaba en un lugar que no conozco. A las cinco y media S. me abrazó y logré por fin reconciliar el sueño. Desperté con la certeza de que mi amor no es incondicional ni lo son tampoco mis afectos. No es que tenga una lista de requerimentos, pero siempre espero algo a cambio: atención, demostraciones de cariño, honestidad. Dicen que los padres sienten amor incondicional por sus hijos, (conozco algunos a los que no se los creería) y aunque así sea creo que siempre esperan, por lo menos, que procuremos llevar bien nuestra vida, que todo aquello que han invertido en nosotros -tiempo, educación, cariño etc.- de fruto de alguna manera.También se dice que quien ama es capaz de hacer sacrificios por la persona amada. Sin embargo yo soy de la opinión de que muchos de los sacrificios que realizamos son para construír nuestro propio carácter, no para satisfacer las necesidades de los demás, sino las propias. Muchas veces pienso que los sacrificios hechos verdaderamente por amor deben permanecer como secretos, que eso los mantiene lejos de alimentar nuestro ego y les permite seguir siendo genuinos. Mi amor no es incondicional, ni lo son mis afectos, aún así no tengo bien claro lo que eso significa... ¿quiere decir que sé que hay cosas que necesito de los demás y que no temo pedirlas? ¿que sé que los demás también esperan cosas de mí? ¿Por qué tendría que ser incondicional el amor? ¿No implica eso una anulación completa de nuestro ser, del que ama y de su forma de amar? ¿Seguiría amando si no recibiera nada de lo que espero?No sé lo que significa. Mi amigo sufre penas de amor. ¿Por quién sufre, por él o por los demás? De pronto traducir cosas sobre Alfoso el Sabio, parece más fácil que asomarme y discernir lo que hay en mi propio corazón. lf.

18:00


25 noviembre

Primera ola de frío

Alguna vez Ingrid me dijo que al sentir el impulso de escribir, no lo reprimiera, que en ese momento no debía existir nada más importante que escribir, que lo hiciera como si de eso dependiera mi vida. Siguiendo su consejo llené cuadernos, me escribí cosas en las manos cuando iba por la calle y no tenía ningún otro lugar para hacerlo, grafiteé, para horror de mis padres y otros familiares, las paredes de mi recámara, apunté cosas en los vidrios húmedos, en las zuelas de mis zapatos escribí palabras que nacían sólo con el propósito de morir... hoy he sentido el deseo irrefrenable de abrir el blog y escribir, sin propósito ni idea clara, sólo escribir para existir, como cuando uno canta para recordar que tiene voz. lf Caerá el día con su voz irrefrenable de silencio, y seremos ciegos caminando entre la niebla, palpando su efímera existencia de humedad y bruma.lf.

12:07

23 noviembre

Queja

Atendiendo a una queja de S. hoy no escribo blog y me voy a hacer un cómic. Se los cuento: aparezco como Jedi, con mis chongos y los pies chuecos, mi sombra es la de un conejo... lf

22:25

22 noviembre

¿Aferrada yooooo?

Aferrado. El DRAE tiene un problemita con su página, así que no puedo dar la definición exacta. En México es un coloquialismo que se usa para decir, en términos generales, que una persona es muy aprehensiva. No se trata de un término peyorativo pero tampoco es halagador. Yo lo admito: soy una aferrada de lo peor. En tanto algo se me mete a la cabeza me ronda la frente, las orejas, visita cada uno de mis cabellos, baja por el cuello, me da cosquillas en los brazos y en las piernas, me duerme los pies, me apretuja el estómago y acaba por tomar la forma de un suspiro constante e inconsciente. Con semejante sintomatología no me queda más que aceptar que se trata, si no de una enfermedad, sí de un estado en el que me encuentro con relativa frecuencia. Hay ocasiones en las que aferrarse a algo trae buenas consecuencias, como cuando empecé a jugar squash (para quienes no lo sepan tengo dos pies izquierdos, nada de equilibrio y reflejos nulos) el aferrarme me dio la fuerza para sobreponerme a mi ego literalmente golpeado, al sentimiento infantil de "odio al maestro de educación física" y finalmente para aprender el juego y divertirme (sigo teniendo dos pies izquierdos pero se tropiezan un poco menos, mi equilibrio sigue siendo nefasto pero mis reflejos logran ya defender a mi ego de los pelotazos). Otras veces es más bien absurdo, basta con recordar los ya tan mencionados sueños en falso alemán. Y finalmente, ser aferrado puede ser de lo más perturbador, especialmente cuando el objeto, acción o idea aferrada se encuentran fuera de nuestro alcance. Por ejemplo: llevo una semana tratando de reunirme con, digamos "Paquita", para tratar un tema que tendrá repercusiones directas en mi vida. Sin embargo Paquita se ha visto obligada a cancelar nuestra cita, luego no contestó los correos y tampoco respondía el teléfono. ¿Qué le ocurría a Paquita? ¿Por qué no me contestaba? ¿Acaso el tema que teníamos que tratar se había visto afectado por algo que desconozco? Me aferré. Hice mil hipótesis sobre lo que le había ocurrido a Paquita, al mundo y al tema en cuestión: Paquita se había sacado la lotería y había decidido visitar Taiwan porque era lo más exótico que se le ocurría, y por eso su móvil se encontraba fuera de área, o bien yo había ofendido al universo sin darme cuenta y ahora éste, sabiendo mi urgencia por ver a Paquita había puesto todos a los elementos para comunicarme con ella en mi contra; así el tiempo la echaba a patadas de la casa justo unos segundos antes de que la llamara, el aire se enrarecía al rededor de su móvil cuando yo le marcaba, un insólito aire de aventura llevaba a Paquita por un camino a casa que nunca toma mientras yo la busco en el camino de siempre. Y del tema... ni hablar: una vecina me escuchó susurrárselo a la almohada en mis sueños, como buena gallina se lo contó a la vecina de la vecina y así la pobre Paquita escuchó que yo había dicho lo que no he dicho y, ofendida, decide ignorarme por el resto de nuestras vidas. ¡Pobre Paquita! ¿Pobre Paquita? ¡Pobre de mí! Paralizada con semejante trabajo de imaginación he sido incapaz de hacer cualquier cosa productiva que no sean labores del hogar y algunos ejercicios de portugués. Díganme por favor si no es perturbador ser aferrado. Hoy Paquita ha escrito: su ausencia y silencio se deben a un viaje imprevisto en el que lo ha pasado pipa. ... la maldición se rompe, todos los castillos de la imaginación se desvanecen, la preocupación se marcha un poco malhumorada y yo, al sentirme liberada pienso para mi misma: "Mi misma, eres una aferrada. Tienes que aprender a relajarte un poquito por favor" y Mi misma contesta "¿Aferrada yooooo?" y mi misma y yo nos atacamos de risa al imaginar a Paquita en traje de baño rodeada de Taiwaneses escandalizados. lf

21:00


21 noviembre

noite

la noche trae una desolación inexplicable... y el consuelo del blues. lf

23:27

Na janela

De los recuerdos más jóvenes que conservo, de esos hábitos que uno agarra de niño, o que de niño lo agarran a uno, sobrevive el de la ventana. En la primera casa de la que guardo memoria pasaba horas sentada en la terraza viendo las flores de cempasuchitl que crecían en el jardín; en la segunda veía principalmente dos cosas: las sombras de los árboles proyectadas en el techo o en la alfombra azul que amis ojos se convertían en los barcos que mi padre navegó cuando era marinero, en los cerros llenos de nopales en los que mi abuelo tuvo su rancho, en los estampados de las telas con las que mi madre confeccionaba los vestidos de las novias, en los lugares y personajes sin nombre que mi mente imaginaba; lo otro que invariablemente me sentaba frente a la ventana y mantenía durante horas mi atención era la lluvia. Además de las figuras me gustaba el sonido que hacía en el techo y contra los vidrios. Años después descubrí el texto de Cortázar explicando mejor que nadie la fascinación de la lluvia en los cristales. Tengo 27 años y he vivido en 13 casas, de todas, menos de la primera, guardo recuerdos de lo que se ve a través de sus ventanas, de cómo huele el aire al abrirlas por la mañana, del color del cielo al ponerse o levantarse el sol. Todas esas ventantas han sido mis ojos, y también a mí me han visto a través de esas ventanas. Estoy convencida de que mis vecinos de enfrente son de algún país helado porque tienen siempre las ventans abiertas y andan siempre sin suéter o sin camiseta. Ellos saben que aquí somos dos y que vivimos en gran parte a través de esta preciosa Mac. Saben también que los vemos y que nos sabemos vistos pues no respondieron al brindis de año nuevo que hicimos con ellos levantando las copas en la terraza. Sólo a través de estas ventanas he visto nevar, sólo a través de éstas he tenido conciencia de ser vista. Ahora tengo una nueva ventana, ésta que no es tan distinta de las de cristal: algo dejamos ver... algo dejamos a la imaginación, otro tanto se queda en recuerdo... flores negras en blancos campos...lf... pelas janelas verdes eu te veio passar.

20:51

20 noviembre

When I'm 84

Hoy pasé la tarde con una mujer admirable de 80 años: con una carrera académica de una dedicación y cariño que no sé ve a menudo, con una alegría y ánimo por vivir que ya quisieran muchos jóvenes, pero sobretodo, y esto me parece lo más admirable de todo, con una humildad y sencillez que son sin duda reflejo de una gran sabiduría. Más tarde llamé a mi abuela para felicitarla por sus 64 años de casada. No pude hablar con ella, estaba dormida y con un estado de salud delicado. Mi abuela no tuvo una carrera académica, pero sí que ha tenido una vida difícil que le ha legado también, humildad, sencillez y sabiduría. En vista de las expectativas de vida, dejo de cantar "When I'm 64" y cambio el número por "84", pienso en la vida de estas dos mujeres y en cómo seguir su ejemplo para llegar a esa edad con la mirada tranquila, me pregunto cómo han logrado mantenerse tan fuertes y tan enteras, tan inocentes en este mundo que está hecho un lío... me pregunto a quién habrán querido parecerse ellas cuando tenían mi edad. Quizá sea allí donde todo empieza: en creer que se puede llegar a ser longevo con una vida que ha valido la pena, con la mirada sabia y serena. lf

22:26
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17 noviembre

sentido de ¿éxito?

Mi amiga china también agregó a nuestra vida un vocablo para expresar si quedamos o no satisfechos con las cosas que hacemos. Ella lo llamaba "Sentido de éxito" y explicaba que hay cosas que a uno le dan ese sentido rápidamente, como cuando se nos antoja una manzana, la compramos y al hundir los dientes descubrimos que está dulce y jugosa como la mejor de las tentaciones. Hay otras cosas en cambio, cuyo sentido de éxito es difícil de obtener, como con la investigación: uno lee páginas interminables de teoría, junta corpus durante días, meses, años; piensa, da vueltas, examina mil veces las hipótesis de trabajo, para al final del día sentir que el tiempo ha pasado sin que lográramos absolutamente, n a d a... o cuando se te antoja un mango, lo compras, lo muerdes y no te sabe a nada porque lleva tres meses congelado. En realidad el concepto no es nuevo, uno siempre tiene conciencia del "sentido de éxito" aunque no haya pensado nunca en él como concepto, sin embargo haber acuñado esa palabra en mi vida diaria ha funcionado como un remedio casi mágico. "¿Cómo te fue?" me pregunta S. al verme regresar del megasupermercado gigantesco que queda a una hora de casa "Fatal. No había tortillas de maíz, ni frijoles enlatados, sólo había productos falso-mexicanos y unas latas de chiles caducos. Tampoco encontré el fuego para la fonduera y para colmo todo estaba atascado de gente con síndrome navideño adelantado" "¿Entonces no compraste nada?" "No... mi sentido de éxito está derrotado" después de decir eso nos atacamos de risa y yo me siento completamente liberada de mi frustración. Ni hablar, que me encantan las palabras y los extraños efectos que logran sobre nosotros... sólo me gustaría poder burlarme del sentido de éxito en los persistentes sueños en falso alemán. Por favor, ya alguien dígame que también sueña con palabras ¿no?lf

18:47


16 noviembre

Teatro y cigarra

Cuando uno dice que extraña a una persona peca de inexactitud: a veces se extraña la presencia física, un aroma, el ruido que hace al moverse, la manera de mirar o de acariciar; otras se extrañan actitudes, un comentario amable o una verdad dicha claramente; pero a veces lo que se extraña es la manera de ver y narrar la vida. Eso es lo que yo más extraño de mi amiga china, que mediante sus palabras siempre un poco enigmáticas, yo era capaz de ver el mundo con ojos nuevos. También extraño su manera de decir las cosas ya que, si bien todos sabemos que las mujeres juntas somos invariablemente un constante parloteo, ella decía "Dos mujeres juntas ya son teatro". En otra ocasión le conté a manera de chisme que alguien me espiaba y que a esa persona la estaba viendo una tercera y ella sentenció: "La cucaracha acecha a la cigarra sin saber que a ella la cazará la golondrina". Los refranes con los que hablaba me hacían sentir que mi experiencia era importante pero que no era la primera vez que ocurría, y las metáforas con las que se expresaba me resultaban tan novedosas que la vivencia en cuestión perdía cualquier rasgo de vulgaridad. Hoy extraño su forma de ver la vida, de expresar esa visión y la humildad con la que lo hacía. Cansada de mis ojos, de mi propia ansiedad y existencia me pregunto cómo me describiría ella. Acaso diría que la cigarra, cansada de cantar, se mira las patitas sorprendida por su silencio. lf.

20:35

14 noviembre

En defensa de la escritura electrónica

El viernes pasado asistí a una jornada científica sobre la escritura popular. Entre la lectura de una entrada de un diario de una telefonista en los años ¿60? y la carta que escribió un hombre antes de ser fusilado, entre la búsqueda de legitimar la escritura privada como recurso válido para la construcción de la historia y las consideraciones técnicas para su edición, alguien mencionó, entre otras formas de comunicación actual, los blogs (juro que no fui yo, yo chitón chitón que fui para aprender y no para armar bulla). De inmediato hubo una resistencia respecto al estudio de estos medios (los electrónicos, mensajes telefónicos, los chats etc.), se dijo que no tienen materialidad, que presentan mucha intertextualidad y, aprovechando que estábamos ahí uno que otro estudiante, que las abreviaturas con las que se escriben los msn y chats no son propias en los exámenes de la universidad.... total que no se atrevían a entrarle al torito. Ojo: nadie dijo que no fueran válidos ni los despreciaron, sólo dijeron que eran medios difíciles de estudiar. Lo primero que me brincó fue lo de la materialidad: al menos yo (que como ya saben soy una maniática) guardo un cd con las cosas que aquí aparecen, tengo también guardados todos los chats desde que llegué a este país (suman más de 500 folios ya) y sé que algunas de las personas con las que chateo también guardan su copia; los correos que escribo los imprime mi padre y van de las manos de mi madre a los oídos de mi abuela y de mis primas... total que lo de la materialidad no me convenció nada. Finalmente me causó gracia pensar que por parecer tan inasequibles, estos medios que para muchos están al alcance de la mano, resultaran un poco marginales. Yo tengo además del blog el viejo diario escrito a mano, son dos cosas distintas pero las dos me parecen igual de valiosas; la diferencia es que en uno escribo para mí y mis cercanos, y en el otro para quien tenga la voluntad de leerme y todo lo que eso conlleva. Vivo a través de estas experiencias escritas y de alguna manera soy estas experiencias escritas. En fin, pensé que la mejor manera de expresar mi opinión era mediante el blog y que si se puede invitar al estudio serio de estos medios ¿qué mejor que la experiencia del blog? ¡Estamos vivos and the time is now! Debo confesar que no llevo el fin de semana planeando esta defensa (me fui a ver la Novia Cadáver y a comer fechuada) y que me ha salido hoy casi sin querer. Ya ven que cuando me dejo llevar por la espontaneidad vamos a dar a lugares... como estos. lf

11:50

10 noviembre

Necedades.

Levanté al diminuto ratón por la cola temiendo que intentara morderme. Ví como movía desesperado sus patitas, como deseaba ser lagartija para apartarse de mis dedos aunque por ello tuviera que perder un pedazo de su cuerpo. En la casa grande los mataban: si uno aparecía por la cocina los niños nos quedábamos quietos y gritábamos como nos habían enseñado hasta que un adulto venía y lo mataba a golpes. Ni siquiera creo que vivieran en la casa, seguro se colaban del jardín. Son bonitos los ratones de jardín. Tomó un descanso de su frenética carrera aérea, y se las arregló para levantar la carilla y verme insistente con sus diminutos ojos negros. "¿Y tú de dónde te has colado?" "Bájame y te digo." "¿Huirás?" "No sin antes responder." Lo puse en el suelo que era blanco y de papel pero no lo solté de todo: mantuve mi dedo pulgar sobre su cola por si intentaba escapar. "Tonta, no me he colado de ninguna parte. He estado aquí siempre." "¿Y por qué no te había visto?" "Porque estás muy ocupada con las palabras esas en alemán" dijo con una risita que trató de ocultar tras sus diminutas manos "Todos sabemos que eso no es alemán" concluyó un poco sonrojado "Yo también lo sé pero no puedo evitarlo. Anda, dime de dónde saliste" "¡Qué necia! Soy un recuerdo, vengo de un libro chiquito en el que tú trataste de escribir cuando todavía no conocías la 'a' ni por lo redondo." y diciendo esto retiró su cola de debajo de mi dedo y se puso a roer el piso del cuarto que era de papel "¡Vamos a caer!" grité asustada, "¡Qué va!" y armó con la hoja recortada un avioncito de papel. Montados en él fuimos a dar a un lugar colorido en el que yo jugaba a ser niña y en el que todo tenía nombres en falso alemán. lf. PD Ahí nadie perseguía nunca al ratón.

17:16

08 noviembre

tristeza del mundo y sueños ficticios en alemán

No soy una persona a la que le guste estar informada tres veces al día sobre las desgracias del mundo. Desde que no tengo televisión (un año ya) me siento liberada de ese exceso de miedo y culpa infundados por los medios. Sin embargo últimamente me parece que el mundo se cae a pedazos: como si fuera poco con las guerras, llegan huracanes y terremotos. Ahora París vuelve a incendiarse y yo leo a diario el blog http://perso.wanadoo.fr/malversando/blog.html de un trotamundos con buen humor que le da un sentido de realidad a lo que ahí pasa. "When I was a child, everything was fine. She said, I know what is like to be dead". De pronto me pregunto si el mundo no ha estado siempre así de cabeza, si no seré yo la que de pronto se da cuenta. When I was a child everything was fine. Quizá sea que mi liberación de los medios, de las imágenes excesivas me dan espacio para pensar y comprender esos hechos de manera distinta. Quizá es que ahora tengo más amigos de lugares que antes me parecían como inexistentes y que ahora son más reales. Definitivamente no volveré a los medios....perdonen la tristeza... Llueve de nuevo. Me iré a la cama esperando no soñar con las palabras disque en alemán otra vez. Anoche: zfsdhaufer Wighetesen y de pronto decía "¡Claro! Thamshkkk significa muchacho y sllllaaufen es el adejtivo" y en el sueño veía la imagen de un astronauta que de pronto era designado con esas palabras ficticiamente alemanas. Si no tuviera la certeza de enloquecer con la tesis, el portugués y las traducciones estudiaría alemán con S. sólo para calmar mi subconsciente... por favor ¿alguien más sueña con las palabras? lf

23:07

06 noviembre

Canijas nostalgias

Normalmente no me permito las nostalgias, procuro pasar de ellas y pasarla bien. También hay algunas que no se pueden evitar, como cuando un buen familiar o amigo en el chat se olvida de que llevas meses sin ver una tortilla o probar algo picante, y uno se queda pensando en las tortas de tamal con un Jarocho en Coyoacán. El asunto es que como procuro ignorar mis nostalgias o por lo menos no regocijarme en ellas, las canijas han encontrado la manera de hacerse presentes: anoche soñé que estábamos todos en esta casa: mis padres, los de S., Constanzza, Acheron y los gatos. Habíamos cenado kebabs y planeábamos desayunar unos huevos del cheff en el Montmartre de Coyoacán. He traído esa imagen a cuestas todo el día, una necesidad de la compañía, la tortura de antojo...canijas nostalgias, aquí les rindo honor a ver si así me dan tregua. lf

21:43


02 noviembre

sobre el té y otras sutililezas

Ayer le envié un correo a mis familiares que corrieron con la suerte de que la aduana mexicana no "confiscara" el té que les envié con mis suegros, sobre cómo preparar una buena taza de té. Terminé el mail con algunas anotaciones sobre el arte japonés de la ceremonia del té, sobre vivir el instante, concentrarse en él, en el sabor de la infusión que se toma, en existir sencillamente, concentrados en eso y nada más. Como contraste, llego al final del día con un montón de fotografías del último viaje a Portugal y tinta verde para acabar de escribir e ilustrar mi diario de viaje. Soy un puñado de memorias, me empecino en preservarlas, en describirlas, en no dejarlas morir. S. me ha dicho desde hace tiempo que somos memoria ¿acaso no son eso nuestras cartas de amor, los diarios, las agendas, los álbumes de fotos...? Más aún: los zapatos rojos con la suela rota que no me atrevo a tirar, los timbres postales de las cartas que vienen de México, los malos dibujos que me niego a borrar... Con todo ese legajo bajo el brazo pongo a calentar el agua, hago malabares para bajar las bolsitas de aluminio y celofán de la campana de la cocina, vacío una cucharada rasa, toco las hojas secas con las yemas de los dedos sólo por placer, vacío el agua, bebo el té y el instante renace... Perdone...lo que usted ha leído es ya una memoria compartida. Un trozo de mi vida se colado en su exitencia, nada grave, una sutileza. lf.

01 noviembre

Calaverita

Por las fechas, pensé en tratar de poner un altar en casa, idea fugaz. La exilié de mi cabeza tan pronto como la reconocí. "Vete querida, no quiero invocarte, la gracia de tu ausencia me ha sido concedida" me sonrió irónica y se marchó. Han sonado las campanas todo el día, las mujeres suben a los autobuses con los brazos llenos de flores. Ella, insistente, se me apareció en una película, Northfork, para decir que presenciar la muerte es un privilegio de la vida. No le he puesto su altar y se me ha colado entre los ojos. Me gustaría tener una calaverita de chocolate escribirle mi nombre y comérmela para curarme de espanto y de melancolía. A falta de eso y de mi habilidad para escribir una calaverita que nos haga reír o que por lo menos no tenga los versos cojos, me beberé un caballito de tequila a la salud de los muertos pero sobretodo de los vivos. Ustedes que están en esa hermosa tierra, cómanse una calaverita a la salud de su servidora.lf A Lu le da miedo la muerte/ porque de noche le grita" ¡UUUUUU!"/ luego brinca y le dice sonriente:/ "¡La Reina Loca eres tú!"/ "Tengo mi coronita de papel"/ le responde adormilada/ "pero no se lo digo a nadie/ por miedo de que me manden a la tiznada"/ "¡Que te manden!¡Que te manden!"/le responde la calaca/"así nos vamos juntas/ a festejar a la chingada"/"¿Y ahí que hay de interés?"/pregunta atolondrada/ "Vino tinto y ajedrez/ para pasar la velada"/"Yo sólo juego backgamon y memoria"/dice Lu para escaparse/"Pues que fresa me saliste/ hasta la rima me arruinaste..."/Se echaron un partido de backgamon con tequila reposado/ y luego la Catrina se fue/ con el ánimo rebosado./ Lu durmió tranquila/ la muerte había espantado/ nomás le daba coraje/ que la partida el hubiera ganado./Y colorín colorado esta calaverita se ha acabado.

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